¿UN MUSEO IMAGINARIO? UNA COLECCIÓN MIGRANTE.

Las piezas que conforman las colecciones de los museos tienen vida propia. En el caso de los objetos del fondo del Museo de historia de la inmigración de Cataluña (MhiC), además de vida, tienen memoria, guardan los recuerdos asociados al gesto migratorio. Y hemos querido despertar los objetos encerrados en las vitrinas y en las cajas con un sueño inquieto, y darles voz para que expliquen su historia.

La colección del MhiC se representa mediante la memoria de los objetos silenciados que aspira a ser un pequeño catálogo con un gran significado. Este producto se ha inspirado en André Malraux y su idea de invitar a la creación de un museo subjetivo donde cada visitante pueda hacer su propia colección con obras de diversas épocas, técnicas y elementos estéticos sin más orden que la propia experiencia individual del visitante.